Después de la presión, preocupación y posible sufrimiento que pudo haber sido la primera entrevista (con todo y la espera e incertidumbre de no saber si te llamarían), llega la gloriosa y tan esperada llamada… ¿Podrías asistir a una segunda entrevista?
Sin duda esta resulta ser una buena señal de parte del reclutador, y denota que vio un potencial importante en ti para ocupar la vacante para la cual te estás postulando, sin embargo, en este punto el reto está lejos de superarse, ya que aunque estás entre los fuertemente considerados, la última palabra no está dicha y por consiguiente: es aqui donde se decide todo. Debes prepararte para que esta resulte exitosa y finalmente obtengas ese puesto que tanto deseas (en algunas empresas los filtros de entrevista pueden llegar hasta los 5 o 6, también esto depende del puesto, así que tomaremos la segunda entrevista como si fuera la definitoria).
Te dejamos algunos tips que serán de gran utilidad.
1. Expresa lo que quieres con tu movimiento corporal: No olvides interactuar dando no sólo respuestas concisas, directas y acertadas, sino que también recuerda que el lenguaje coporal resulta clave para conseguir el empleo.
2. Fundamental saber Todo sobre la organización (información pública disponible en su página de internet, folletos o noticias):
Como bien hemos comentado, es muy importante que al asistir a las entrevistas, conozcamos a fondo la información públicamente disponible de la organización.
Si dentro de la primer entrevista es básico que tengamos al menos una idea del contexto de negocio en el que se desenvuelve la empresa, es de suma importancia que ya para una segunda hayamos profundizado en su visión, misión, filosofía, y sobre todo cultura organizacional, para ir ligándola a nuestros intereses y a partir de este punto, tener planes de accion y vision de trabajo definidos para proponer a tu futuro jefe. Esto servirá también para saber si es realmente lo que estamos buscando desarrollar para nosotros mismos en el tiempo y si se identifica con nuestras metas profesionales en el largo plazo (ejm. Desarrollarte en Gerencia de productos en Marketing, estando en el área de Finanzas..).
3. Repasa las preguntas de la primer entrevista.
Intenta recordar las primeras preguntas con las que te abordó el reclutador, al igual que tu manera de contestarlas. Todos al salir del primer encuentro, analizamos en automático el papel que hicimos al igual que la manera en que contestamos, por lo que resulta básico reflexionar sobre las mismas para detectar pequeños errores, tratando de evitarlos en la segunda cita pero sobre todo, No contradecirnos en entrevistas subsecuentes que podrían perjudicarnos hasta el punto de negarnos la oportunidad de laborar.
Te recomendamos que anotes aquellas preguntas en las que sientes que fallaste u olvidaste mencionar algo para perfeccionarlas posteriormente, aunque debemos estar conscientes que no todas las entrevistas ni entrevistadores son iguales, por lo que lo mejor es ser nosotros mismos siempre, tratando de dar nuestro mejor aspecto individual.
4. Destaca tus fortalezas.
Al encontrarte ya en esta segunda etapa, el reclutador sabe que cuentas con las cualidades para poder desempeñar el puesto, sin embargo, ahora tendrás que demostrar que tu perfil y nivel cultural encaja con los de la empresa. Para esto, el siguiente tip te será de gran ayuda, al demostrar tus conocimientos e interés sobre la organización.
Es lógico que en este punto serás comparado con los otros postulantes finalistas, sin embargo, lo importante es que estés consciente de tus cinco puntos fuertes, eligiendo por lo menos uno que consideres que destaca de los demás. Debes evitar «pintarte como la mejor opción sobre la tierra», sin embargo, si se permite hablar moderadamente sobre esas habilidades en las que te consideras apto.
Es indispensable que el entrevistador vea en ti un «match» casi en automático opción para el puesto, ya que esto te garantizará tener un proceso mucho más limpio, fácil y transparente.
5. Crea y facilita la interacción.
Es posible que en esta ocasión te entrevisten más de dos personas, ya que la segunda cita es un filtro de mayor importancia. Resulta básico que sea quien sea, logres un contacto visual con el entrevistador.
Debemos procurar respetar «el ritmo» que inconscientemente establece el reclutador, ya que demostrará paciencia e interés en tus palabras. Al finalizar la segunda entrevista, es posible que consideremos enviar algún correo de agradecimiento, haciéndonos presentes en el proceso, y demostrando sobre todo nuestro interés en el puesto.
La clave para conseguir el éxito en cualquier entrevista laboral se resume a la preparación y la paciencia. Considérate como el candidato fuerte y efectivo que eres. Recuerda que como te ven te tratan, y si crees en ti mismo, irradiarás seguridad y positivismo. ¡Ánimo!